Si aparece un strap-on en la pornografía, solo dice una cosa: hoy alguien terminará suculentamente con los movimientos de un juguete de plástico en su agujero. Esta herramienta versátil debería ser absolutamente para todas las parejas en el armario. El sexo con un arnés puede complacer no solo a las lesbianas, sino que también se convierte en una excelente opción para complacer a su amado esposo y organizar el pegging para él. Nadie ha podido dejar de follar con un strapon todavía, porque nada diversifica tanto la vida sexual como este simple dispositivo.